WHALE RIDER (2002)

Película dirigida por Niki Caro que nos acerca un poco al pueblo maorí, que se supone que llegó a Nueva Zelanda hace miles de años proveniente de Polinesia. Como buenos descendientes de Paikea, el Jinete de las Ballenas, tienen costumbres ligadas al mar, en una zona en que abundan estos enormes cetáceos tan codiciados por franceses e ingleses en la época de las colonizaciones.

La niña que protagoniza esta historia (Keisha Castle-Hughes) vive en un pueblo costero en el esperan al nuevo líder que suceda al jefe actual (el abuelo de la niña), un profeta que les guíe y una en los tiempos que corren, donde las tradiciones se pierden fácilmente. Todos tienen puestas las esperanzas en que el hermano gemelo de esta niña sea ese lider, pero tanto él como la madre mueren en el parto. El padre, embargado por el dolor, deja el pueblo y termina rehaciendo su vida en Alemania, donde es un artista reconocido (y yo me preguntó que se le ha perdido a un neozelandés en Europa...) La niña se cría con los abuelos. Aunque demuestra desde un principio que ella tiene las aptitudes para ser ese líder que esperan todos, el abuelo la ignora al tratarse de una niña. Tampoco la tiene en cuenta cuando decide montar una escuela para enseñar las tradiciones a los niños en una tentativa más para encontrar a ese ansiado líde, pero ella consigue prepararse a escondidas demostrando su gran voluntad y las ganas de ganarse el respeto del abuelo.

En la peli se deja entrever a un pueblo guerrero con habilidades para el canto, el arte del tatuaje y las danzas guerreras con sus gestos de aviso, saludo y amenaza reflejados en los ojos desorbitados, la lengua afuera, los sonidos guturales. Me parece, en todo caso, que consigue que nos interesemos por esta cultura tan distinta a la nuestra. Como peli costumbrista está muy bien y la historia emociona (tengo que confesar que lloré). Entre los actores destacar a la niña (a años luz de los mocosos de Las Crónicas de Narnia) y a Cliff Curtis (en el papel del padre de la niña) al que conocemos de pelis como Training Day o El Jurado. Música de Lisa Gerrard, por cierto.